El Coronavirus Canino
Cuando tomamos la importante decisión de acoger a un perro en nuestro hogar estamos aceptando la responsabilidad de cubrir todas sus necesidades, físicas, psíquicas y sociales, algo que sin lugar a dudas haremos gustosamente, pues el vínculo emocional que se crea entre una mascota y su propietario es muy especial y fuerte.
Los perros requieren controles periódicos de salud, así como seguir el programa de vacunación recomendado, no obstante, aún cumpliendo estas premisas básicas es muy posible que nuestro perro se enferme, por lo que es muy importante estar pendientes de todas aquellas señales que nos advierten acerca de una posible patología.
En esta ocasión te hablamos de los síntomas y tratamiento del coronavirus canino, una enfermedad infecciosa que si bien evoluciona favorablemente, también requiere atención veterinaria con la mayor antelación posible.
¿Qué es el coronavirus canino?
El coronavirus canino es un agente patógeno de naturaleza vírica que causa una enfermedad infecciosa en los perros independientemente de su edad, raza u otros factores, aunque sí es cierto que los perros cachorros son más susceptibles de contraer esta infección.
Se trata de una enfermedad de curso agudo. Para comprender mejor este concepto podemos compararlo con el resfriado que solemos padecer los humanos, ya que al igual que el coronavirus se trata de una enfermedad vírica, sin cura, que únicamente debe pasarse y que es autolimitada, es decir, con un curso agudo y sin posibilidad de cronificación.
Los síntomas de la enfermedad se empiezan a manifestar tras el periodo de incubación, que suele durar entre 24 y 36 horas. Se trata de una enfermedad tan contagiosa como prevalente, aunque si es tratada a tiempo no suele presentar ninguna complicación ni secuela posterior.
Síntomas del coronavirus canino
Si nuestro perro ha contraído esta enfermedad podemos observar en él los siguientes síntomas del coronavirus canino:
- Pérdida del apetito
- Temperatura superior a 40ºC
- Temblores
- Letargo
- Vómitos
- Deshidratación
- Dolor abdominal
- Diarrea súbita y fétida, con sangre y moco
Nuestra mascota puede estar infectada y no manifestar todos los síntomas aquí expuestos, por lo que es de vital importancia acudir al veterinario aunque sólo observemos uno de tantos signos, ya que el éxito del tratamiento del coronavirus depende en gran parte de la rapidez con la que se detecte la enfermedad.
¿Cómo se contagia el coronavirus canino?
El coronavirus canino se excreta a través de las heces, por lo que la vía de contagio mediante la cual esta carga vírica pasa de un perro a otro es a través del contacto fecal-oral, siendo un importante grupo de riesgo todos aquellos perros que presentan una alteración de la conducta llamada coprofagia, que consiste en ingerir heces.
Una vez el coronavirus canino ha entrado en el organismo y se ha cumplido el periodo de incubación, ataca las microvellosidades del intestino (células imprescindibles para la absorción de nutrientes) y causa la pérdida de la funcionalidad de las mismas, lo que provoca de forma súbita la diarrea y la inflamación del aparato digestivo.
Tratamiento del coronavirus canino
Como hemos mencionado anteriormente, el tratamiento del coronavirus canino es paliativo, ya que no existe una cura salvo esperar a que la enfermedad termine de realizar su curso natural, por lo que el tratamiento se enfoca básicamente en aliviar los síntomas y prevenir posibles complicaciones.
Se pueden emplear los siguientes métodos de tratamiento sintomático, de forma única o combinada, dependiendo de cada caso en concreto:
- Fluidos: En caso de deshidratación severa se utilizan para reponer los fluidos corporales del animal.
- Estimulantes del apetito: Permiten que el perro pueda seguir alimentándose evitando así un estado de inanición.
- Antivirales: Actúan disminuyendo la carga vírica.
- Antibióticos: Destinados a controlar infecciones secundarias que pudieran haberse causado por acción del virus.
- Procinéticos: Los procinéticos son aquellos fármacos destinados a mejorar los procesos del tracto digestivo, podemos incluir en este grupo los protectores de la mucosa gástrica, los antidiarreicos y los antieméticos, destinados a evitar los vómitos.
Obviamente es el veterinario la única persona capacitada para recomendar un tratamiento farmacológico a nuestra mascota y este debe ser empleado siguiendo las instrucciones específicas que nos brinden en la clínica.
Prevención del coronavirus canino
Prevenir el coronavirus canino requiere únicamente de dos acciones sencillas pero completamente necesarias para mantener el estado de salud de nuestra mascota:
- Seguir con el programa de vacunación establecido
- Mantener unas condiciones de higiene suficiente en los accesorios de nuestro perro, tales como juguetes o mantas
También debemos recordar que una alimentación adecuada y el suficiente ejercicio físico ayudarán a que el sistema inmunitario de nuestro perro se mantenga en un estado óptimo.